La INTENCIÓN viene de lo más profundo del SER de la PASIÓN y MOTIVACIÓN que cada uno tiene para estar en este mundo, en esta Vida. Es el impulso de CREAR, MANIFESTAR convertir un Sueño en realidad.
Un SUEÑO es ya una posibilidad de materialización en la medida en que evoca un sentimiento de ENTUSIASMO al contemplar la VISIÓN del hecho concreto. La emoción asociada a la imaginación, al pensamiento provoca la fuerza para avanzar en la visión hacia la ACCIÓN.
ATENCIÓN, este factor carga de energía realizadora lo que la imaginación está produciendo. Definir el "¿qué? ¿cómo? ¿con qué? ¿cuándo?" requiere de enfoque suficiente, constante y en revisión, reciclando conceptos, creencias; evolucionando el pensar y el sentir hacia el SUEÑO. El enfoque es el medio para ajustar la meta, los procesos, los pasos, las fechas. Mantener el enfoque y realizar los ajustes necesarios lleva, invariablemente al alcance de la meta, la realización del SUEÑO.
Un estado interno de ENTUSIASMO es perfecto punto de partida para definir una INTENCIÓN; surge el anhelo y la confianza, el deseo y la certidumbre; la VISIÓN de que ya estamos en donde creemos que nos corresponde, es un hecho! Entonces surge la posibilidad de quedarse el deseo en una ensoñación, alegoría de imágenes mentales o bien llevarlo a la realización a la materialización.
La capacidad de cuestionarnos genera los procesos para concretar un deseo, un pensamiento, una idea: "¿qué quiero realizar? ¿a dónde quiero llegar? ¿para qué?"; esta última pregunta es el puente para clarificar y permitir entonces iniciar una fase de "recolección de información" "¿qué tengo en congruencia con la meta? ¿qué necesito? ¿cómo consigo lo que necesito".
Responde estas preguntas para clarificar tu INTENCIÓN...
Acompaña tu ejercicio con música relajante, sin letra. Recuerda cuando soñabas, ensoñabas en la infancia durante tus juegos y tiempos de ocio.
Cada inicio es un nuevo avance en tu evolución.
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